martes, 5 de agosto de 2014

SERVIR TE EQUILIBRA Y TE SANA


SERVIR TE EQUILIBRA Y TE SANA


Una de las grandes oportunidades de sanarse y lograr una verdadera trascendencia es dar a otros. Algunos casos que nos permiten experimentar el dar:
• En el sufrimiento. 
Cuando una está sufriendo normalmente está centrado en sus problemas y a veces no sale de sí mimos. Es por ello, que no hay mejor medicina que ayudar a otros. 
Algunas ideas de dar: Puede visitar a un enfermo, atender y escuchar a una persona que está pasando por dificultades o hacer ayuda social en una zona de bajos recursos, etc.
El solo hecho de hacer algo por el otro saca al que está sufriendo de su encierro en sus problemas para ver que hay otras personas padeciendo y enfrentando dificultades mayores. Y experimentará una mayor sanidad y una nueva perspectiva.
• En la cima.
Cuando la vitrina está llena de trofeos y se está en la cima de la montaña el ayudar a otros dará trascendencia y equilibrará el ego.
Algunas ideas: Apoyar en campañas de ayuda social, ir a zonas de bajos recursos a servir a niños en necesidad, dar consejos a personas que están necesitando apoyo, ofrendar tiempo y enrolarse como voluntarios en grupos de ayuda a otros, etc.
El sólo acto de ayudar a otros equilibra, da gozo y sentido a la vida. Y más aún si la entrega es sin esperar nada a cambio que va más allá de lo material.

No olvidemos que el Señor Jesús enseñó que “más bienaventurado es dar que recibir”, lo que implicaba que uno era más rico cuando daba a los demás.

SERVIR TE EQUILIBRA Y TE SANA
El Señor Jesús enseñó que “más bienaventurado es dar que recibir”.
El dar a los demás lo hace a uno más rico y lo engrandece notablemente.
Además, le dará equilibro en la cima y sanidad en el sufrimiento.

Bendiciones,

PATG

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